Un Salvaje Aries Apareció
La tierra tembló cuando se aproximaba el enorme carnero. El aire se estremeció con los rugidos del dragón. Ambos anunciaban la llegada de poderes más allá de la comprensión humana, monstruos que provenían de la antigua era de héroes. Por un lado, el golem definitivo de Megrez, creado en la cúspide de su poder, estaba al acecho. Por otro lado, un familiar de la Suprema Gobernante de Alas-Negras rápidamente se aproximaba. La tensión se apodero del campo de batalla cuando las bestias se midieron entre sí. Sin embargo, Gants y sus aliados solo podían mirar con una mezcla de espanto y asombro cuando se desató el infierno.
"¡¡Rooooaaaaar!!"
"¡¡Baaaaa-a-a-aaah!!"
Un grito de guerra. Solo eso producía violentos vientos que atravesaban la frontera, levantando nubes de ceniza y polvo. Aunque Megrez se mantuvo firme durante este intercambio, gotas de sudor brillaban en su frente. Él sabia - Sabía que ya había pasado su mejor época. Y que si Levia, la obra maestra que había forjado en la cima de su poder, caía, el no sería capaz de reemplazarla. Más importante, él solo no podría plantarle cara a Aries en si estado debilitado, y Suvell seguramente perecería.